Wayne Cordeiro
¿En quien … PUEDES … confiar?
Frecuentemente he escuchado estas palabras. ¿Podemos confiar en la gente? ¿No es nuestro meta? ¿No deberá ser ideal? Sin embargo, estoy encontrando algo que pudiera ser inquietante cierto aún liberador. ¿Con qué frecuencia me molesta la verdad antes de que me libere?
Ayer me reuní con una persona que está teniendo problemas con otro cristiano por un abuso de confianza. Se trataba de un acuerdo comercial, y lo que era “cortesía común ” para uno a la otra persona, no era nada.
El sintió que si hubiera dice otro hermano, un apretón de manos sería suficiente. Pero ahora, hay muchos malentendidos y la relación se ha roto.
Me encontré con una versículo inquietante que me hace libre.
“Pero Jesús mismo no se fiaba de ellos, porque conocía a todos, y no tenía necesidad de que nadie le diese testimonio del hombre, pues él sabía lo que había en el hombre.” (Juan 2:24, 25)
He encontrado que la Palabra de Dios dice que Jesús NO puso su confianza en el hombre, pero eso no significa que Él no le amara (o ágape). Salmo 103 nos recuerda con estas palabras: “Él conoce nuestro mismo marco; Él es consciente de que no son más que polvo.”
Se esto por mi mismo. Olvido esto en otras.
Vamos a parar un momento y pensar sobre esto. El hombre está hecho de cuerpo, alma y espíritu, y la parte del cuerpo, o la carne, nunca será salvado ni jamás será redimido. No puede ser de confianza, y que nunca se convertirá. Así, 1/3 de cada persona es básicamente, de poca confianza. Lo puede atacar a usted en cualquier momento, y es mucho más interesados en asimismo que otros. Eso es simplemente la manera en que está diseñado. Si piensa en ello, hay a lo sumo, un 66% de probabilidad de que se puede confiar en ellos para tener éxito todo el tiempo. Pero a menudo nos parece que debería ser un 100%. Nadie puede cumplir con esa norma. Sólo Jesús puede, y quizás he estado esperando que la gente haga solo, lo que sólo Jesús puede hacer.
¡Interesante!
He visto en la Palabra, adonde maridos y esposas debían confiar el uno al otro, pero distinto de eso, debemos poner nuestra confianza en el Señor. Debemos amar “ágape” los unos a los otros, pero nuestra confianza estaré segura solo en el Señor. Esto no significa que estamos desconfiando. Sabemos lo que está en el hombre … 2/3 de confianza, a lo mejor. Eso es lo que Jesús mostraba en Juan 2:24.
Todos debemos estar de acuerdo que, también nosotros, son en ocasiones, de poca confianza. Aunque que sabemos completamente lo que debemos hacer, no lo hacemos nosotros. Para nuestra vida, relaciones, y moralidad, hacemos objetivos justos pero es nuestra falta de disciplina que nos hacen de poca confianza. Tenemos grandes estudios bíblicos, proponemos cosas buenas y la forma en que debemos: someter, ser enseñable, y ser piadosa, infinitamente. Pero eso es su límite. En otras palabras, no ni siquiera podemos confiar en nosotros mismos de que vamos a seguir adelante. Nuestro corazón es inconstante, y nuestro compromiso es inestable.
Sin embargo, Dios es absolutamente digno de confianza.
Pero cuando las personas no están a la altura de nuestras expectativas, frecuentemente perdemos nuestra paz interior. Las relaciones son tensas, las cosas se mantendrán ocultas, nos sentimos frustrados, y reducíamos del uno al otro. Pero veamos lo que se dice Isaías:
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. (Isa 26:3)
He buscado esta paz ideal, pensando que lo encontraré en mis amigos y las personas que me rodean, y en quienes podía confiar completamente. En vez de encontrar eso, me había desencantado, y para tener esa perspectiva podría realmente ser igual a egoísmo por mi parte. Esto significa que estoy buscando gente que piensa como yo, actúan como yo, y hablan como yo.
No clonación, por favor.
Sin embargo, puedo confiar completamente en Cristo. Recuerden que, Jesús es el Príncipe de Paz (Isaías 9:6)
Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. (Isa. 9:6)
Por lo tanto, continuo confiando en el Cual que es digno de confianza, mi mente se mantendrá en perfecta paz. Amaré la gente con un amor de ágape, deseando el mejor para ellos, pero si ellos no cumplen, no dejare de amarles.
Confía en Cristo … Ama la gente.
Por años, creo que he estado haciéndolo mal. Me he estado amando a Dios y tratando a confiar en las personas. Pero tengo que amar la gente y confiar en Dios. Tengo que recordar que, 1/3 de cada hombre estará en la carne y completamente de poca confianza, no importa cuán buenos o santos sean.
Isaías 26:10 dice: “… en tierra de rectitud hará iniquidad, y no mirará a la majestad de Jehová.
La Oración de un Líder:
Querido Padre:
Yo devuelvo mi confianza a Ti, solo a Ti. Creo que mi mente no ha estado en perfecta paz porque he tenido como mi meta, el confiar en los hombres. Pero nunca dijiste eso. Quizás por eso es que la paz ha sido inalcanzable. Voy a mantener mi mente firmemente fija en Ti. Voy a amar la gente y confiar en Ti.