Por Wayne Cordeiro

¡Cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos convivan en armonía! (Salmo 133:1)

Durante el intervalo  de 34 años como Pastor,  he tenido el honor de acompañar a muchos en sus últimas horas. Y así  como  un talón se cierra,   así se cierran  vidas breves de aquellos, que al final  nada nos queda solo los restos vitales.  Y casa vez,  sin falta,  todo lo que pensamos que era  importante, durante nuestras vidas,  se desvanece  en comparación con el  deseo de haber tenido una relación sana.

Al final, nuestra relación vertical con Cristo y nuestras relaciones horizontales con la gente es lo que realmente vale.

Muchas veces no reconocemos lo que es la vida eterna hasta que estamos cara a cara con él. Pero, ¿por qué esperar?

Jesús nos  recuerda del mandamiento más importante  el cual es Marcos 12: 30 “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón” lo mismo “Ama a tu prójimo como a ti mismo. A continuación, concluye con estas palabras: “No hay ningún otro  mandamiento más importante que este “;

Viviendo en la unidad …

Esto, no significa que siempre vamos  a estar de acuerdo. Sin embargo, lo que  significa es que nos tenemos que apoyarnos, nos tememos, que hablar bien, nos tenemos que  querer mucho,  y que  siempre  vamos a permanecer en el mismo equipo. Somos una unidad somos un solo cuerpo.

Cierto que el  corazón no funciona como el  hígado. Ni tan poco los  riñones saben funcionar como  los  pulmones. Pero todos juntos en unidad en armonía es lo que hace al cuerpo funcionar, sin competir,  ni tampoco, tratando  de sobresalir. ¿En lugar de ello  tratan de asignar lo que cada parte puede hacer mejor entre su  capacidad. Y mientras tanto  el resto se mantienen apoyando y animando.

Cuando Dios ve lo que está sucediendo en  su familia, Él se apoyara sobre el balcón del cielo y con un suspiro de alegría, dice, “Simplemente no hay nada mejor que esto”

¿Qué puede hacer usted hoy que promoverá unidad con sus hermanos y hermanas en Cristo?