Pastor Wayne Cordeiro
Mientras hacía mis devocionales hace un tiempo atrás comencé a pensar sobre las “franjas” y cuán importantes son para nosotros, incluso en estos días. Miremos a Números 15:37-41:
Y Jehová habló a Moisés, diciendo, “Habla a los hijos de Israel, y diles que se hagan franjas en los bordes de sus vestidos, por sus generaciones; y pongan en cada franja de los bordes un cordón de azul. Y os servirá de franja, para que cuando lo veáis os acordéis de todos los mandamientos de Jehová, para ponerlos por obra; y no miréis en pos de vuestro corazón y de vuestros ojos, en pos de los cuales os prostituyáis, para que os acordéis y hagáis todos mis mandamientos, y seáis santos a vuestro Dios. Yo Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para ser vuestro Dios. Yo Jehová, vuestro Dios.”
Ahora, no estoy hablando de coser un montón de franjas en nuestras ropas y luego salir a caminar por ahí. Estas franjas fueron utilizadas específicamente para recordar a la gente las cosas que el Señor les había ordenado a hacer. Tenían el propósito de ayudarles a permanecer fieles a lo que Dios les había llamado a hacer y no seguir en pos de sus propios corazones y ojos.
Hay una diferencia entre una franja y un adorno. Los adornos por definición son cosas que son triviales y poco importantes. Una franja, sin embargo, debe permanecer como recordatorio de lo que Dios nos ha llamado a hacer. Las franjas no son adornos.
Si alguien visitara tu casa y no sabe que eres cristiano, ¿podría darse cuenta que tú eres alguien que ama al Señor? Si alguien entrara en tu oficina, ¿sabría al minuto que tú eres creyente? ¿Es obvio que tú y Jesús andan juntos?
Cuando entras por las puertas de Nueva Esperanza, ¿qué ves? Ves una franja: Nuestra Declaración de Misión. Por todos los pasillos de nuestro Centro Ministerial encontrarás nuestra Base de Valores inscriptos en letras, enmarcados y colgados en las paredes. Aquí en Nueva Esperanza creemos que Dios nos dio nuestra Base de Valores, así que los hemos instalado como franjas sobre todo el edificio como un continuo recordatorio.
En el Centro de Líderes, nuestro sitio de principal reunión, hemos colgado franjas “para mirar y para recordar todos los mandamientos del Señor.” Tenemos el cartel de Haciendo la Iglesia en Equipo, un recordatorio de una parte intrincada de lo que Dios nos ha llamado a hacer como cuerpo de la iglesia. También verás un gran cuadro de Jesús colgado prominentemente, ya que él es nuestra razón de hacer todo que hacemos. Además, sabemos que Dios nos ha llamado a tener una mentalidad global. Por esta razón tenemos banderas colgadas del techo como franjas que nos recuerden nuestro llamado no sólo a ir, sino también a orar regularmente por las naciones.
Como puedes ver, no estoy hablando de adornos; estoy hablando de cosas que son recordatorios de lo que Dios nos ha llamado a hacer. Estas franjas imparten visualmente a todos los que pasan por allí exactamente en qué creemos y qué valoramos como importante. ¿Qué tan visibles son tus franjas?